The Legacy of the Bones
Año de producción
2019
Duración
121 min.
Sinopsis
Pamplona (capital de la Comunidad Foral de Navarra; norte de España). Un año después de los crímenes de Basajaun, la inspectora Amaia Salazar, embarazada de nueve meses, se encuentra en el juzgado de la ciudad a la espera del juicio a Jason Medina, acusado de violar, mutilar y matar a su hijastra Johana Márquez. Pero justo antes del juicio, Medina es encontrado en el baño del juzgado tras suicidarse cortándose las venas, dejando una pequeña nota en un bolsillo de sus vaqueros con una sola palabra escrita: "Tarttalo". Esto provoca que Amaia rompa aguas para dar a luz a su hijo Ibai, haciendo feliz a ella y al escultor y artista galerista James Westford, marido de Amaia. Reincorporada al servicio activo cuatro meses después, Amaia es llamada por su superior para que le entregue dos casos diferentes: Monseñor Landero y el Padre Sarasola le encargan específicamente que investigue con sigilo la profanación de una pequeña iglesia donde fue dejado el brazo amputado de un bebé en el altar, y un hombre encarcelado en Logroño (comunidad autónoma de la capital de La Rioja) por el asesinato de su mujer le ha enviado una nota revelando dónde está el cadáver de su esposa con "Tarttalo" en el mensaje, suicidándose después de entregar la nota a un guardia de la prisión. Al encontrar el cadáver en las cercanías de Elizondo, Amaia e Ibai regresan a su pueblo natal donde se reencuentra con la tarotista tía Engrasi, y sus hermanas mayores Flora y Rosaura, felices por el nuevo miembro de la familia. Al descubrir que las dos mujeres asesinadas fueron amputadas de su brazo derecho después del crimen, coincide con la profanación de la iglesia, después de saber que todos los brazos fueron cortados con el mismo patrón y arma. Al descubrir que está relacionado con los Agotes, una tribu perseguida en la Edad Media por la Inquisición española debido a sus creencias y ritos paganos, y que Tarttalo es el nombre de un antiguo mito (un gigante que se comía a los cristianos), Amaia pide ayuda por videoconferencia a su antiguo mentor y agente del FBI Aloisius Dupree, al mismo tiempo que la tía Engrasi usa el tarot para predecir lo que podría suceder y el juez Javier Markina sigue con atención la investigación. Por lo tanto, provoca un enfriamiento en la relación entre James y Amaia, a pesar de que él mueve a Elizondo para estar más cerca de su esposa e hijo. Sin embargo, el caso da un giro dramático por una doble entrada: el brazo amputado del bebé resulta ser el de la hermana gemela de Amaia, de la que nunca supo que existía, y la madre de Amaia, Rosario, recluida en un hospital psiquiátrico desde hace muchos años después de intentar matar a Amaia cuando era niña, ha matado a un enfermero que escribía con sangre "Tarttalo" debajo de la cama, lo que provoca la reaparición del enigmático y demasiado psiquiatra Padre Saralosa, que se interesa por Rosario y convence a Amaia para que traslade a Rosario al hospital universitario de Saralosa que él dirige. Obligada a indagar en su pasado familiar, Amaia no sólo descubrirá la relación entre su madre y una secta dedicada a un culto pagano que incluía sacrificios humanos, sino que todos los crímenes tienen una conexión demasiado personal con ella. Mientras Elizondo corre peligro por una inundación que se aproxima, Amaia debe resolver el caso e identificar al asesino antes de que el más querido para ella sea la próxima víctima.