Ferran Freixa diseñó el logotipo de King Kong acechando la iglesia de la Punta, que quedaría fijado como icono del Festival. Bigas Luna y el autor teatral y director Jaime de Armiñán formaron parte del jurado. De entre todos los invitados, el que más expectación generó fue Ray Harryhausen, quien trajo consigo una muestra de las criaturas que animaba artesanalmente y que siguen despertando el sentido de la maravilla en la mirada del espectador. La poética imaginación de Jean Cocteau fue recordada con una exposición y la proyección de Le testament d’Orphée. Fue muy celebrada la recuperación de Stalker, la obra maestra de Andrei Tarkovski. La primera película dirigida por una mujer presentada en el Festival se pudo ver este año: fue The Silent One, de la neozelandesa Yvonne Mackay.
- Inicio
- El Festival
- Historia
- 17ª edición