White Epilepsy

En la penumbra, un cuerpo se mueve lentamente, saliendo de la oscuridad total. Luego aparece un segundo cuerpo, el de una mujer. ¿Sueño o pesadilla? ¿Arcaico o esencial? ¿Deseo o lucha? Un viaje a través de la noche y la luz hasta los confines de los sentidos y la visión. Son fantasmas, ¿existen realmente? Una película como un sueño o una pesadilla. En medio de un bosque, dos cuerpos desnudos, los de un hombre y una mujer, realizan una coreografía muy lenta y espantosa. Parece un ritual milenario de dominación y sumisión. El fantasma masculino se retira, pero la mujer no lo deja ir: se arroja sobre él. Philippe Grandrieux, el autor de Sombre (1999) y de innumerables películas más, a menudo experimentales, muestra la lucha ceremonial a cámara lenta, con los cuerpos que a veces parecen no ser más que una colección de músculos, tendones y carne pálida, como en las pinturas de Francis Bacon. Además de ser aterradora y violenta, la danza a veces parece sensual.